miércoles, 21 de noviembre de 2007

Hugo Chávez, el Maestro de la Provocación


No hubo ningún golpe de estado, sino una masacre de ciudadanos cuando el pueblo venezolano defendió el modelo profesional de PDSA

Se hace oportuno para Diario de América, hacer una retrospectiva de los acontecimientos de abril 2002, para desmontar esa mentira que Chávez suele terminar por imponer. Es una ficción del tipo de ficciones que es más fácil de creer que la realidad. Para quienes no lo conocen como lo conocen los venezolanos de la democracia, que lo padecen, Hugo Chávez no es más que un rústico dictador tropical mentiroso.

El supuesto golpe de estado en Abril de 2002 comenzó cuando el pueblo venezolano cayó en la provocación de defender el modelo profesional de la industria petróleos de Venezuela, PDSA.

Esa provocación consistió en despedir a sus profesionales, a todos aquellos que estaban resistiendo la politización de la compañía petrolera estatal, el domingo anterior a la masacre. El descaro mayor, cuando años más tarde, reconoció provocar la confrontación porque le era necesario, en un discurso ante la Asamblea Nacional.

La estrategia era que en la previsible reacción nacional, los profesionales en la industria protestarían, lo que los identificaría ayudando a la subsecuente purga, "limpieza política".

En ocasiones sucesivas el gobernante venezolano ha provocado con insultos a las personas (y ¡hasta instituciones!) que le son obstáculo para alcanzar y disfrutar el poder absoluto que lo obsesiona. Lamentablemente, la provocación resulta efectiva porque de esta manera obliga a las personas a actuar a destiempo, mientras Chávez está completamente preparado para distorsionar y manipular las interpretaciones de los acontecimientos, y así siempre gana.

Sobre la relación de hechos que se suscitaron, en Diario de América hemos tomado como fuente lo expresado para una entrevista en Minuto Digital, por la periodista venezolana Martha Colmenares, reconocida por sus reiteradas publicaciones para desmontar esa mentira del golpe.

Manifestantes como quien le responde, nos encontrábamos dentro de la marcha de más de un millón doscientos mil personas, en lugares de excepción, por lo que podemos afirmar con la autoridad de testigo presencial, cómo los grupos armados paramilitares afectos al gobierno de Hugo Chávez, así como militares, estaban masacrando a los manifestantes.

Mientras que el gobierno impedía que las personas conocieran lo que en realidad estaba pasando al obligar a una transmisión conjunta “en cadena” nacional, de televisión de una alocución históricamente insulsa del presidente Chávez, en la que queda muy claro que simplemente estaba matando el tiempo mientras la masacre ocurría.

Lo confuso del día comienza cuando la masacre de los manifestantes no se lleva a cabo en la escala que el régimen pretendió, sino que por el contrario, militares de la más alta confianza del presidente, como el General Rosendo, desobedecieron las órdenes de masacrar la manifestación. Es tan particular la sucesión de hechos de ese día, que su crónica desapasionada es increíble:

En horas de la noche, el único bando que logra sacar tanques de guerra a la calle es el bando oficialista, que al mando, de quien más tarde llegaría a ser, Ministro de la Defensa, el General Jorge Luis García Carneiro, lleva un destacamento de tanques a proteger la sede del gobierno, el Palacio de Miraflores.

Luego en horas ya de la medianoche, día 12, se pronuncia también en “cadena” nacional ante el mundo, el General Lucas Rincón Romero, acompañado del Alto Mando para anunciar que Chávez renunció, y así dijeron:

“Los miembros del Alto Mando Militar de la Fuerza Armada Nacional de la República Bolivariana de Venezuela deploran los lamentables acontecimientos sucedidos en la ciudad capital en el día de ayer. Ante tales hechos se le solicitó, al señor presidente, la renuncia de su cargo, la cual aceptó”.

Diario de América aporta a sus lectores este VIDEO que apoya lo expresado.

Sin embargo, la implosión del régimen era tal, que el presidente negocia a través de la Conferencia Episcopal Venezolana la entrega del poder a los militares en rebelión. En rebelión, sí, pero en rebelión *pasiva* al negarse a acatar las órdenes genocidas del régimen. Casi de inmediato, los hechos políticos que se suceden conducen a una rebatiña por el poder en las altas esferas y el decreto emanado de Pedro Carmona resulta anticonstitucional.

Lo que hace que los mismos militares que con su ascendiente sobre las fuerzas armadas lograron deponer la tiranía, devuelvan indudablemente sano y salvo a Hugo Chávez.

Muy significativas, las declaraciones, a raíz de los hechos, del teniente coronel Francisco Arias Cárdenas, quien es hoy, nada más y nada menos, que el actual Embajador de Venezuela ante la ONU: “Chávez: “un asesino manchado con la sangre de los venezolanos”.

Y en aras de mostrar la veracidad de lo afirmado, presentamos el VIDEO con las anteriores declaraciones del embajador. Altamente bochornosas, lo que da la medida para entender el nivel de bajeza de quienes acompañan la gestión de este déspota gobernante de los venezolanos.

Como puede apreciarse, Hugo Chávez no fue asesinado en custodia de los militares que desobedecieron su orden de masacrar la manifestación. No fue torturado, no fue golpeado, ¡nada! Sólo estuvo bajo custodia, y fue devuelto a la presidencia habiéndosele respetado la integridad física en todo momento.

Bastante atípico para un supuesto golpe de estado… ¡Como quisiera yo que Chávez respetara la integridad física de sus presos políticos como los supuestos golpistas respetaron la suya!

Un tanto después, el mismísimo Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), literalmente repleto de chavistas, es decir, juristas mediocres que llegaron al tribunal supremo de Venezuela sólo porque eran considerados piezas del oficialismo, absuelven a los militares que desobedecieron la masacre de acusaciones de golpismo.

Y en pleno disfrute del poder absoluto, Chávez nombra sucesivamente a sus grandes adlateres de Lucas Rincón y Garcia Carneiro como ministros; desmantela su tribunal supremo con juristas todavía mas mediocres, pero más leales a su régimen, desmantela otras instituciones como el Consejo Nacional Electoral (CNE).

Igualmente, purga a las fuerzas armadas de oficiales institucionalistas, destruye la Policía Metropolitana de Caracas, y por supuesto, se da inicio al desmantelamiento de la industria petrolera profesional para sustituirla por la super politizada PDVSA de hoy.

Chávez ha actuado de forma muy distinta a los gobiernos de la pasada etapa de democracia disfuncional que, por lo menos, siempre tuvieron muchísimo cuidado de proteger de la politización la industria de petróleos.

A tal punto llega la situación que Hugo Chávez ha convertido al petróleo que en una época se decía ser "de todos los venezolanos”, en su arma letal para satisfacer sus apetitos y ambiciones personales, fortalecer los grupos terroristas del continente americano, apertrecharse de armamento de guerra sofisticado y para provocar a quienes no le siguen en la comunidad internacional.

Tanto es así que hasta osó pretender politizar la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) con su nuevo aliado Mahmud Ahmadinejad. Para muestra en caliente, lo suscitado hace unos días en la III Cumbre de Riad.

Como si fuera poco el bochornoso impasse con el Rey Juan Carlos que ha tenido que decirle recientemente “por qué no te callas”!, el grosero Chávez, en su empeño protagónico de desestabilizar los escenarios internacionales, se ha permitido amenazar con el incremento del precio del hidrocarburo a 200 dólares si “Estados Unidos toma medidas contra su país o Irán”.

Otra de sus ficciones en lo que compete a Venezuela, la de acusar de golpismo a Norteamérica.

El Rey de Arabia Saudita, Abdalá Salem El-Badri, ni corto ni perezoso, a la manera de un “Shut up” ante la actitud desafiante de Hugo Chávez, se encontró en la necesidad de decir en el magno evento: "quienes quieren utilizar el petróleo como herramienta de confrontación ignoran que la OPEP siempre ha sido instrumento de moderación y amplitud".

Y Chávez se tuvo que quedar con la cabeza gacha ante el Rey Abdalá. ¡Que vergüenza con este Chávez, Maestro de la Provocación!


Diario de América

http://www.diariodeamerica.com/front_nota_detalle.php?id_noticia=2673


1 comentario:

J. Sepúlveda dijo...

Parabéns e adelante con la resistencia al tirano Chávez.

Aqui en Brasil se ha hablado mucho del "por que no te callas?" del Rey de España.

Chávez fue golpeado en su imagen internacional. Es importante. Hay que resistir al comunismo.

En mi blog (http://radardamidia.blogspot.com) hice comentarios respecto del apoyo dado por Lula a Chávez. Lula es un ditador en potencia que quiere seguir las huellas de Chávez y que hace todo para ayudar al caudillo a mantenerse en el poder.

Adelante!

http://radardamidia.blogspot.com