En enero de 2007 el presidente Hugo Chávez decidió acelerar el modelo socialista, siendo una de sus aristas la nacionalización de empresas en "áreas estratégicas". El esquema se inició con el control por parte del Estado de compañías de electricidad y telecomunicaciones. Ahora las acciones del Gobierno se extienden a otras áreas de interés como la construcción, y en especial en el dominio sobre los insumos.
El pasado jueves el Mandatario manifestó que las empresas cementeras serán nacionalizadas. "Vamos a nacionalizar la in-dustria del cemento. ¡Ya basta! (...) con esas plantas de cemento se tendrá el poder social, la propiedad social". Y esos señalamientos de Chávez fueron complementados por el ministro de Industrias Básicas, Rodolfo Sanz, quien agregó que la medida forma parte del proceso de control de las materias primas.
En ese sentido, comentó que "estamos avanzando hacia el control de aquellas materias primas de las actividades de la construcción, energía y minerales, y ello nos permite construir un modelo económico con independencia y autonomía".
Las amenazas sobre la producción de cemento están desde hace más de un año. Chávez considera que la producción de ese insumo es de interés nacional y ya en abril de 2007 indicó que no se podía permitir que las empresas se llevaran el producto a otros países y expresó que esas compañías participaron en la ola privatizadora de las cementeras y las siderúrgicas.
Esta semana el ministro de Industrias Ligeras y Comercio, William Contreras, expresó que evaluaban las exportaciones de cemento y que se estaban dando ventajas arancelarias para la venta del producto cuando se registraban necesidades en el país, y dijo que se haría una revisión de esas condiciones.
Sanz apuntó ayer que "la mayoría de las empresas cementeras explotan minas de calizas, que en su mayoría son propiedad de la nación". Y aunque el precio de ese producto está controlado, el funcionario dijo que "hemos venido observando un proceso de cartelización de los precios. Estas empresas se ponen de acuerdo para fijar el precio del cemento, trabajan muchas veces por debajo de su capacidad instalada para no impactar hacia abajo los precios del cemento y exportan una gran cantidad y, en algunos casos, desabastecen el mercado".
Chávez apuntó que "vamos a recuperar eso (las empresas), vamos a hacer un avalúo, le pagamos lo que cueste a esa gente".
Tal como se realizó con la Cantv y La Electricidad de Caracas, el Gobierno contaría con músculo financiero para cancelar a las empresas Cemex, Lafarge y Holcim, porque dispone del Fondo de Desarrollo Nacional (Fonden), el Fondo Miranda, el Fondo estratégico con China, así como de los aportes adicionales que puede hacer Pdvsa.
En ese sentido, comentó que "estamos avanzando hacia el control de aquellas materias primas de las actividades de la construcción, energía y minerales, y ello nos permite construir un modelo económico con independencia y autonomía".
Las amenazas sobre la producción de cemento están desde hace más de un año. Chávez considera que la producción de ese insumo es de interés nacional y ya en abril de 2007 indicó que no se podía permitir que las empresas se llevaran el producto a otros países y expresó que esas compañías participaron en la ola privatizadora de las cementeras y las siderúrgicas.
Esta semana el ministro de Industrias Ligeras y Comercio, William Contreras, expresó que evaluaban las exportaciones de cemento y que se estaban dando ventajas arancelarias para la venta del producto cuando se registraban necesidades en el país, y dijo que se haría una revisión de esas condiciones.
Sanz apuntó ayer que "la mayoría de las empresas cementeras explotan minas de calizas, que en su mayoría son propiedad de la nación". Y aunque el precio de ese producto está controlado, el funcionario dijo que "hemos venido observando un proceso de cartelización de los precios. Estas empresas se ponen de acuerdo para fijar el precio del cemento, trabajan muchas veces por debajo de su capacidad instalada para no impactar hacia abajo los precios del cemento y exportan una gran cantidad y, en algunos casos, desabastecen el mercado".
Chávez apuntó que "vamos a recuperar eso (las empresas), vamos a hacer un avalúo, le pagamos lo que cueste a esa gente".
Tal como se realizó con la Cantv y La Electricidad de Caracas, el Gobierno contaría con músculo financiero para cancelar a las empresas Cemex, Lafarge y Holcim, porque dispone del Fondo de Desarrollo Nacional (Fonden), el Fondo Miranda, el Fondo estratégico con China, así como de los aportes adicionales que puede hacer Pdvsa.
Respuesta
A mediados de 2004 la actividad de la construcción comenzó su repunte, lo que obligó a las empresas productoras de insumos a elevar su capacidad para atender la demanda presentada.
Algunos fabricantes respondieron al crecimiento y elevaron su capacidad, mientras que otros no han podido atender el repunte por factores, siendo uno de ellos la falta de inversiones. En el caso específico del cemento la producción ha estado repuntando con el fin de cubrir las peticiones del sector público y el sector privado. Las compañías llegaron a su máxima capacidad y los cuellos de botella de hace dos años se superaron, salvo las fallas con el transporte por las faltas de unidades.
Al cierre del primer semestre del pasado año se produjeron 3,2 millones de toneladas métricas y, según representantes del sector construcción, las exportaciones disminuyeron con el fin de atender la demanda interna.
Sin embargo, los voceros del Ejecutivo insisten en que se registran problemas con ese insumo. Para abastecer el mercado anunciaron en 2006 que importarían 500.000 toneladas de cemento cubano, de ese monto han ingresado al país sólo 21.400 toneladas métricas, de acuerdo con los datos del Ministerio de la Vivienda y Hábitat.
Representantes de la construcción explican que existen presiones sobre la demanda de cemento porque están coincidiendo las obras privadas y públicas, y estas últimas son las que más demandan del insumo.
Mayores fallas
Pero las mayores dificultades que enfrenta la construcción no están relacionadas con el cemento, sino con los otros productos que se utilizan. Desde hace más de un año se han acentuado fallas con los agregados (piedra y arena), los productos de alfarería (tejas y bloques) y las maquinarias y equipos.
En el caso de los agregados se registran retrasos con la permisología, a lo que se suma el cierre de canteras y areneras, de manera que las empresas que se encargan de la explotación no pueden atender la demanda.
Aunado a los agregados están las dificultades con los productos de alfarería, y ello en gran medida se debe a que no se han realizado las inversiones suficientes para elevar la producción y así cubrir las peticiones.
Si bien el número de maquinarias se ha elevado poco a poco, existen retrasos con las asignaciones de las divisas, especialmente para repuestos.
En esa falta de productos también ha incidido el control de precios desde 2003 y cuya última revisión se efectuó en 2006.
El Universal, Venezuela
http://www.megaresistencia.com/portada/content/view/1785/1/
4 comentarios:
¿Se me permite enlazar su blog al mío?
http://xinhuar.blogspot.com/
Un saludo
Juan:
Por supuesto, enlázalo, y yo pondré un enlace a tu blog.
Saludos
Juan:
Le eché una ojeada a tu blog. Magnífico. Te felicito.
Saludos
Excelente análisis.
Saludos,
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